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jueves, 26 de noviembre de 2020

Comentario al Evangelio – I Domingo de Adviento, Ciclo B (domingo 29 de noviembre) por Mons. João S. Clá Dias, EP

 

El Adviento.

En el inicio del Año Litúrgico, Jesús nos exhorta para que estemos siempre vigilantes, pues la hora del Juicio llegará de repente, cuando menos esperamos. Uno de los puntos sobre el cual debemos tener puesta nuestra vigilancia, según lo alertan varios Papas, es la acción de los medios de comunicación social, que muchas veces invaden nuestras almas y nuestros hogares propagando mensajes e influencias contrarias a la fe y a la moral.

[…] III – Conclusión

En nuestro egoísmo, somos llevados a considerarnos el centro de nuestras atenciones y preocupaciones; la esencia de nuestra vida cristiana, sin embargo es social: “Amaos los unos a los otros” (Juan 13, 34; 15, 12; 15, 17); o: “aquel que ama a su prójimo cumplió toda la Ley” (Romanos 13, 8). Jesús pesa nuestros actos en función de nuestra misericordia con el prójimo, o sea, Él usa un criterio social, para juzgarnos.

Cristo Pantocrátor (Juicio Final, Pinacoteca Vaticana)*

Dios distribuye sus bienes de modo desigual a los hombres, para que unos puedan administrar y otros recibir. Esto sucede no sólo en el campo material, sino sobre todo en el campo cultural y espiritual. Por la misericordia y justicia unidas, seremos juzgados delante de todos los Ángeles y los hombres

Preparémonos, entonces, en este Adviento, para recibir a Jesús que viene en la plenitud de su misericordia, y roguemos a aquella que lo trajo a este mundo, su poderosa intercesión para nuestro segundo encuentro con Él, cuando venga de improviso, en la plenitud de su justicia.

*Al iniciarse el Adviento, la Liturgia nos presenta a Jesús como Rey del Universo.

Se autoriza su publicación citando la fuente.

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