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viernes, 18 de enero de 2019

Comentarios al Evangelio del 2° Domingo del Tiempo Ordinario (domingo 20 de enero) -Ciclo C- por Monseñor João Scognamiglio Clá Dias, EP*

[…] El mejor vino de la Historia: el Reino de María
Ante las perplejidades y aprensiones que el mundo de hoy pueda causarnos, el Evangelio de este domingo nos invita a la esperanza. Porque sabemos que cuando la humanidad llegue a un nivel de decadencia moral donde todo parece perdido, la intercesión omnipotente de María Santísima obtendrá de su Hijo Divino la mutación del agua -en este caso, un agua contaminada por el pecado- en el mejor vino.
La miseria espiritual del mundo se transformará, por intercesión de la Madre de Dios, en algo extraordinario, que no podemos ni siquiera imaginar: el Reino de María, es decir, el triunfo de su Sapiencial e Inmaculado Corazón, anunciado por Ella en Fátima.
La frase del Evangelio de hoy: "Tú has dejado el mejor vino para el final", bien puede significar: "Dejáis, oh Dios, vuestras mejores gracias para los tiempos venideros". Las gracias más excelentes, los más insignes beneficios, los mayores santos, las culturas más exquisitas - todo lo que puede haber de mejor fue reservado para esa era marial.
De un modo suave, pero rápido y directo -tal como el agua fue transformada en vino en las bodas de Caná-, Nuestra Señora obtendrá de su Divino Hijo la santificación de nuestras almas. Para obtener esta feliz renovación, basta con seguir el sabio consejo del abad Jourdain: "Presentadle vuestra necesidad, vuestra miseria, vuestra tibieza y suplicadle: 'Virgen Santísima, me falta el vino del amor y de la devoción, tengo sólo un poco de agua fría e insípida; pedid a vuestro Hijo que la convierta en vino”". [32]
Las Bodas de Caná
En esta venturosa era, María será establecida Reina de los Corazones, y "cosas maravillosas sucederán en este mundo, donde el Espíritu Santo, encontrando a su querida Esposa como que reproducida en las almas, a ellas bajará abundantemente, llenándolas de Sus dones, particularmente del don de la sabiduría, a fin de operar maravillas de la gracia.
¿Cuándo llegará ese tiempo feliz, ese siglo de María, en que innumerables almas escogidas, perdiéndose en el abismo de su interior, se convertirán en copias vivas de María, para amar y glorificar a Jesucristo?” [33]
¡Por amoroso designio de Su Divino Hijo, el mejor vino de la historia vendrá al final, y será el "vino de María"!
(CLÁ DIAS EP, Monseñor João Scognamiglio. In “Lo inédito sobre los Evangelios” Vol. III, Librería Editrice Vaticana).
*Fundador de los Heraldos del Evangelio
Texto original: Comentário ao Evangelho 2º Domingo do Tempo Comum - Ano C - Jo 2, 1-11

[32] JOURDAIN,
Zéphyr-Clément. Somme des grandeurs de Marie. Paris: Walzer, 1900, t.II, p.369.

[33] SAN LUÍS GRIGNION DE MONTFORT. Tratado da Verdadeira Devoção à Santíssima Virgem. Petrópolis: Vozes, 1987, p. 211.