La
vigilancia: ¿una virtud olvidada?
Al iniciarse el Año Litúrgico, el Divino Maestro nos exhorta a tener siempre frente a nuestros ojos el fin último para el cual fuimos creados y a estar preparados para el encuentro con el Supremo Juez. Para lo cual es indispensable la práctica de una virtud muchas veces olvidada o menospreciada: la vigilancia.